Mensajes enviados por un supuesto trabajador a una familiar de María Ercira reflotan la hipótesis del secuestro y su paradero. Sin embargo, Fiscalía no ha investigado la posibilidad.
Este miércoles se cumplieron exactos siete meses desde la desaparición de María Ercira Contreras y una desconocida nueva teoría toma fuerza en medio de la investigación por conocer su paradero.
A la adulta mayor se le perdió el rastro el pasado 12 de mayo durante un almuerzo familiar en un restaurante en el Fundo Las Tórtolas, en Limache, y desde entonces no se ha sabido nada de ella.
Ahora, unos mensajes revelados por La Tercera, los que habrían sido enviados por un supuesto trabajador del recinto donde se vio por última vez a la mujer, darían cuenta de la hipótesis de un secuestro, que hasta el momento no han sido investigada por la Fiscalía.
En concreto, en medio de las diligencias se dio a conocer la existencia de mensajes de WhatsApp enviados por un número desconocido al teléfono de un familiar de María Ercira, los que darían supuestas pistas de su paradero.
El primer mensaje data del 28 de septiembre, donde el remitente se presenta como supuestro trabajador del restaurante en donde se vio por última vez a la mujer.
"Se que a pasado tiempo pero esto no a sido fácil para nosotros como trabajadores pero no soporto más está angustia de tener que vivir callado por miedos que le hagan daño a mí familia (sic)", comenzó.
Acto seguido, señaló que el jefe de local del restaurante en Limache "nos tiene amenazados a todos si hablamos o llamamos a alguien nos va a echar del trabajo y nuestras familias van a sufrir por haber hablado pero la firme es que la abuelita", escribió, añadiendo que "se la llevaron para el sur en Puerto Montt".
Sin embargo, la cosa no terminaría allí, puesto que el remitente, además, dio luces de que fue obligado a eliminar el registro de las cámaras, que recibe amenazas para ocultar lo ocurrido y que pidió a los familiares de la adulta mayor de "desconfiar" de funcionarios policiales.
A un día de la primera tanda de mensajes de WhatsApp, y tras la respuesta desconocida del familiar de la adulta mayor, el autor de los mensajes envió el nombre del administrador del local y que "este matrimonio siempre los vi en cosas turbias acá en Limache".
"Se la llevaron al sur, yo estuve hasta tarde con él y escuchaba las órdenes que daba a la gente. Después le llegaban los audios y le decían que los estaban en Puerto Montt, ellos son venezolanos (sic)", concluyó.
Finalmente, ante el escepticismo del familiar de María Ercira, quien insistió en hablar por teléfono, el desconocido escribió: "Después de todo no me crees. Está bien. Me equivoqué al hablarte".
Los mensajes fueron ocultados por los familiares en medio de la desconfianza por la investigación, por lo que el Ministerio Público no conocía de su existencia hasta hace unas semanas.